¡ULTIMO MINUTO! El gobierno de Gustavo Petro enfrenta una crisis sin precedentes tras las explosivas revelaciones de Luis Gilberto Murillo, quien destapó un oscuro secreto que podría cambiar el rumbo de la política exterior colombiana hacia Venezuela. En una entrevista reveladora, Murillo confesó la existencia de un grupo secreto denominado G3, donde Petro, Lula y AM discutieron en privado estrategias sobre el régimen de Nicolás Maduro.
La situación se torna crítica: ¿por qué Petro rechazaba la exclusión de María Corina Machado en privado mientras mantenía silencio públicamente? Murillo, exministro de Relaciones Exteriores, sostiene que la estrategia inicial de acercamiento prudente a Maduro ha sido abandonada, lo que ha alarmado a analistas y expertos en relaciones internacionales.
Desde su salida del gabinete, Murillo ha notado un cambio drástico en la postura del gobierno colombiano. Lo que antes era una distancia calculada parece haberse transformado en un diálogo más fluido, lo que podría tener repercusiones serias en la estabilidad regional. Este cambio, que él describe como incomprensible, pone en jaque la hoja de ruta diplomática que se había trazado con tanto esmero.
La revelación de Murillo no solo expone las tensiones internas en el gobierno de Petro, sino que también plantea interrogantes sobre el futuro de las relaciones entre Colombia y Venezuela. La comunidad internacional observa con atención cómo este nuevo enfoque podría impactar la ya frágil situación en la frontera y la crisis humanitaria que afecta a miles.
Mientras el país se encuentra en un momento de incertidumbre, las palabras de Murillo resuenan con fuerza: la política exterior no puede ser un juego de azar. La pregunta que todos se hacen es: ¿hacia dónde se dirige Colombia en su relación con el régimen de Maduro? La respuesta podría redefinir el panorama político en la región.